domingo, 29 de julio de 2012

EL GENERAL TIMOTEO OGANDO UN PATRIOTA DESCONOCIDO EN LA HISTORIOGRAFIA SANJUANERA Y NACIONAL


                      



Sobieski De León Laza
Tertulia “El Patio del Doctor”
  Miércoles, 25 de Julio 2012
  4to. Aniversario



En la obra “Héroes Distinguidos de la Restauración y los Seis Años en el Sur y   Suroeste de la Republica” del sanjuanero Manuel de Jesús Rodríguez Varona, a modo de prologo, sus hijos dicen lo siguiente: La familia Rodríguez-Rodríguez procreada en su totalidad en las asoladas tierras del Sur y mas específicamente en San Juan de la Maguana, ha querido traer a la luz publica y sacar del desconocimiento y el olvido a todos aquellos luchadores que con su valor y su espada contribuyeron a darnos la patria que hoy disfrutamos libre y soberana.

Agregan: En esta lucha sobresalieron hombres valientes, desinteresados y auténticos patriotas que posiblemente desconozcan los habitantes de estas comarcas. Nuestro padre quiso siempre sacar del anonimato y del olvido a aquellos valientes que lo dieron todo por la patria (1)

De los 24 personajes biografiados en la obra, curiosamente, el primero que aparece en la lista es el General Timoteo Ogando, oriundo de Pedro Corto, distrito municipal de San Juan de la Maguana.

Puede sernos de alguna utilidad definir la Historia como ciencia, porque hay quienes sostienen que la Historia no es científica.

Historia: Es la ciencia que tiene como objeto el estudio del pasado de la humanidad. y cuyo propósito es la fijación fiel de los hechos y su interpretación atendiendo a criterios de objetividad, aunque la posibilidad de cumplir tales propositos y el grado en que sea posible son en si mismos objeto de debate (2)

Los científicos sociales o cuentistas sostienen que la Historia se nutre no solo de los Acontecimientos que relata una persona en particular sino sobre todo de los documentos o pruebas objetivas que pueda sostener la validez del “hecho histórico”. Hay algo mas aun con mayor peso que el “documento” de acuerdo a determinados lingüistas,
el doctor Odalis Pérez entre ellos, escritor y critico sancristobalense. Esta otra condicion es “la correcta interpretación del documento”.

Hay versiones practicas sobre el concepto de la Historia, criterios pragmáticos que tal vez sean acientíficos como el que dice que “la Historia la escriben los vencedores”. O aquel lamento definitorio que es la contra-parte del anterior que reza: “Ay de los vencidos!”. Hay quienes sostienen que la Historia “la cuenta cada quien según sus intereses”. El medico ortopeda y traumatólogo sanjuanero Justiniano Colon Puello, que hizo sus especialización en Barcelona, España, nos trajo una interesante definición de la Historia que oía constantemente a su suegro, veterano de la Guerra Civil Española:
“La Historia es, la hijeputada que los vivos les hacen a los muertos”.

El General Timoteo Ogando, natural de Pedro Corto, ha encontrado en otro hijo pedrocorteño su mas connotado biógrafo que cumple con la justicia que hay que hacerles a nuestros pro-hombres y que preconizara Manuel de Jesús RodríguezVarona, hijo del héroe de la Restauración General Mariano Rodríguez Objío.

Esta “Tertulia: El Patio del Doctor” se inscribe en ese camino trazado por Agramonte y Rodríguez Varona que esta noche no tiene otra intención que seguir en el propósito de dar a conocer a un autentico y desinteresado patriota.”Los héroes no dijeron nunca que morían por la patria, sino que murieron”, nos lego el poeta y revolucionario nicaraguense Leonel Rugama.

Carlos Agramonte sitúa a nuestro héroe nacional en tres escenarios históricos como prueba de su conducta, honestidad y patriotismo:

1)      Nuestras Guerras de Independencia de 1844
2)      Nuestras Guerras Restauradoras de 1863-65
3)      Las Guerras de los Seis Años o Guerras Anti-Anexionistas contra la pre-- 
tendida intención de anexar la Republica Dominicana a los Estados Unidos.
Entre 1868-1873, o ultimo periodo del dictador Buenaventura Báez

En todas esas guerras peleó defendiendo nuestra nacionalidad el General Timoteo Ogando Encarnación.

Muchos fueron los intereses que se fueron conformando en la sociedad dominicana de 1844. Los de las potencias que gravitaban en ese momento en que se crea la Republica: España, Francia, Inglaterra y los Estados Unidos de Norteamerica. La formacion de los “hateros” como clase social con Pedro Santana a la cabeza; los intereses de los pequeños y grandes comerciantes como Buenaventura Báez. La derrota haitiana y la secuelas de guerras dominica-haitianas que siguió a ese hecho, unas doce en total. La aparición y monopolización del caudillismo usufructuado por Santana y Báez. Desde la Independencia hasta un poco después de la Restauración.

Atrapado en esa nueva sociología  dominicana que surge y que desembocara en una verdadera explosión de caudillos, centenares de generales caudillos, se va a desarrollar la heroicidad del General Timoteo Ogando, ascendido de simple soldado a capitan por el mismo presidente Pedro Santana “por meritos ganados en Santomé”. Pero antes, desde el mismo nacimiento de la Republica se hubo integrado al Ejercito Inde pendentista recién formado. Desde sus inicios estuvo siempre orientado por el General Jose Maria Cabral, de manera que antes de Santomé, ya habia participado en las guerras independentista de 1845 y 1849, al lado de hombres de la talla de Antonio Duvergé, héroe de la Batalla del 19 de Marzo en Azua contra los haitianos.

Para 1855, Timoteo Ogando y sus hermanos “ya formaban parte de los combatientes dominicanos que defendían la integridad de la nación en toda la comarca sureña, especialmente en la frontera dominico-haitiana” y para 1858, en momentos en que Pedro Santana era el presidente, aparecen siete de los hermanos Ogando Encarnación firmando con otros hombres públicos  una proclama desde Las Matas de Farfán adhiriendose al “Manifiesto Nacional de la Ciudad  de Santo Domingo”, lo que demuessu ascenso social y su importancia político-militar (4)

El 18 de Marzo, Santana proclama la Anexión de la Republica Dominicana a España y los dominicanos reaccionan repudiando la traición que echaba por el suelo toda lagloria y la historia alcanzadas en los campos de batalla por la Independencia Nacional.

Dos meses antes, uno de los fundadores de la patria, Francisco Sánchez del Rosario habia hecho publica su celebre Proclama del 20 de Enero de 1861, en donde llama a derrocar a Santana por traidor y vende patria. Sánchez, lo llama déspota, enemigo de nuestras libertades, plagiario de todos los tiranos, escándalo de la civilización y ase-
sino instintivo.

Cuando organiza una expedición desde San Thomas para luchar contra la anexión, en la organización esta presente el Capitán Timoteo Ogando, quien funge como uno de los hombres de mayor confianza del General de División Francisco Sánchez “por ser uno de los mas prácticos de la Región Sureña”.

He ahí un salto cualitativo de Timoteo Ogando que, reconociendo en Sánchez al verdadero patriota, lo sigue y sale de la sombra funesta y abarcadora del Presidente Pedro Santana. Quizás el hecho mas conocido de Timoteo Ogando es el ofrecimiento de las ancas de su caballo al patricio para sacarlo de la emboscada y salvarle la vida, gesto que Sánchez rechaza “porque considera indigno abandonar a sus compañeros”. Timoteo le salva la vida en esa ocasión al General Cabral, al trinitario Pedro AlejandrinoPina, al teniente Jacinto Peynado y a otros mas llevándolos a Haití “porque conoce palmo a palmo todo el Suroeste y la frontera”. De Haití, regresa de nuevo a nuestro territorio para seguir enfrentando a Santana y su Anexión del lado de los restauradores. 

Para el 5 de Diciembre de 1864 es uno de los primeros que están al lado del General Cabral en la Batalla de La Canela, de donde saldrá herido por tratar de salvar al General Cabral de una estocada de sable que iba dirigida al héroe de Santomé. Esta batalla histórica, una de las grandes victorias restauradoras sobre el ejercito invasor español, para cierto poeta pseudo historiador “nunca existió” o “no fue otra cosa que una simple escaramuza”. Este “historiador de su familia” que lo único que hace es encontrar virtudes en sus ascendientes y relacionados y desméritos en los demás, llama a la glo- riosa Batalla Restauradora de La Canela de la forma mas ridícula posible que alguien pudiera escuchar: “La Emboscada Victoriosa de La Canela”. Acepta que fueron vencidos los españoles; no puede negar, porque los hechos les dan en la cara, que los españoles (y los dominicanos traidores que los acompañaban, como su abuelo Eusebio Puello),  “fueron realmente derrotados, pero que no hubo tal batalla”. “Ni siquiera un combate”. Y se basa para afirmar esto en “…las reglas militares establecidas por los altos militares españoles en el Expediente de Clasificación de Hechos de Armas para la Campaña de Santo Domingo” (5)

“Que ridículos y obcecados son los miembros de las oligarquías haciendo Historia”

Todo el mundo sabe hoy dia –y lo sabían los propios combatientes-, lo sabía Sánchez, Cabral, Timoteo Ogando, Gregorio Luperón, el poeta Manuel Rodríguez Objío, Gaspar Polanco, Santiago Rodríguez, Benito Mención, Cayetano Rodríguez,  lo sabían todos, que la táctica de guerra empleada por los restauradores desde el mismo inicio de la guerra, era del tipo de “guerra de guerrilla”, lo que el poeta santanista-anexionista llama “Emboscada Victoriosa”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario