martes, 27 de septiembre de 2016
Fiestas de San Miguel Arcángel
Roberto Rosado Fernández
UASD, San Juan de la Maguana
El 29 de septiembre de cada año, es el día de San Miguel, pero todo el año, en cualquier fecha, se hacen celebraciones en su honor. Las invitaciones saltan a la vista y es que a San Miguel se le atribuye poderes protectores en contra de la influencia de malignidades que deambulan por las calles promoviendo el mal. Es el jefe de los ejércitos de Dios. "El protector de los inocentes y juez de la maldad. Guardián de los ejércitos cristianos y el Ángel que derroto a Satanás y lo echó del cielo con su espada de fuego. Se encarga, además, de purificar el planeta".
En el día de San Miguel se destacan celebraciones en Juan de Herrera, Corral de los Indios, en Lemba, Doña Reya, Doña María, San Juan, Osiris, entre otras no menos importantes.
La de Osiris, en el Barrio Aura Mesa, por la Circunvalación Norte, cientos de creyentes, de todas las edades, de todos los lugares del país, a pie, en motocicleta, en vehículo de lujo, en Bus del transporte público y otros medios, acuden a la Fiesta de San Miguel.
Osiris es el curandero que cada año deleita al público con la organización de esta Fiesta en honor a San Miguel. Discolith, bachata, bebidas alcohólicas, carnes de toda variedad, víveres, arroz, chanchen, frijoles y más, satisface el apetito de los asistentes.
Dentro de la Ermita, hay un santuario con imágenes de todos los calibres y variedades, comandados por San Miguel, y una Tina en donde los creyentes depositan sus plegarias al compa de velas encendidas durante todo el día.
Es un día de celebración. Se come, a veces desenfrenadamente, se baila acordeón, palos, merengue bachata, salsa, en disfrute de esta expresión de religiosidad popular.
Vestimentas diversas, a veces en promesas y otras veces exhibiendo modas del momento, caracterizan a los participantes.
Desde bien temprano en la mañana los que vivimos en esa calle y en el resto del Barrio observamos el ir y venir de los visitantes, la hilera de vehículos que se estaciona, a veces obstruyendo el paso hacia los garajes de las viviendas que allí existen. Tenemos que escuchar, sin quererlo, tal vez, la estridencia de la música en plena calle, los excesivos gritos manifestando exageradamente su alegría y las frases vulgares que los efectos del alcohol les hacen pronunciar.
Al caer la tarde, reducida la bebida y la comida, se nota la bullosa salida de borrachos, anunciando el fin de una fiesta, que si bien es una expresión de religiosidad propio de la zona, y a la que acuden mucha gente sana, es prudente que se tomen algunos correctivos para que la gente la disfrute sin crear contratiempos a los moradores que viven tranquilamente en dicho Barrio.
Un poco más al norte, en la comunidad de Lemba, se celebra, el mismo día, La Fiesta de San Miguel o Fiesta de Doña Reya. Esta tradicional fiesta la hacía Doña Reya desde décadas atrás. Los asistentes son creyentes y amigos de la familia. Después de su muerte sus hijos la han continuado en su honor y para alegrar a Colo esposo de Doña Reya.
Las comunidades aledañas y gente del país se pasan todo este día en salves, acordeón, palos domino, bebida y comida a todo dar. Es válido hacer notar que en esta fiesta se disfruta sin exceso debido a que la mayoría de los asistentes obedecen a un criterio básicamente religioso, por eso la gente adora al santo cantando salve, comiendo, bailando palos, acordeón y luego regresa a su hogar satisfecho del deber cumplido conforme a su grado de creencia obedeciendo a los mandatos de San Miguel.
Sobresale, además, la celebración de Amantina García, en El Corral de los Indios, en Juan de Herrera. Aquí se pasa un día de honor a San Miguel con canticos religiosos, palos, acordeón , comidas , bebidas y un compartir prolongado de los asistentes bajo las atenciones exquisitas de un equipo seleccionado por Amantina para atender con distinción a todos los asistentes. A esta asiste mucha gente, de muchos lugares del país. Es muy concurrida debido, además, a que se realiza frente a la Plaza Ceremonial Indígena, lugar de ceremoniales a la Reyna Anacaona.
Estas tres veladas religiosas copan el escenario de celebración del día de San Miguel Arcángel en San Juan de la Maguana. Los creyentes asisten indistintamente tanto a estas como a otras que sin mucha rimbombancia se realizan para cumplimiento del alto nivel de religiosidad que caracteriza a la mayoría de los Sanjuaneros.
Concluye, este ciclo de celebraciones en las fiestas de diciembre, también en honor a San Miguel. Sobresale, entre otras, la fiesta de Cari, en la 19 de abril, zona sur. Allí hay una Ermita, un gran altar, palos y una Tina, construida exclusivamente para adorar a San Miguel.
Cari vive fuera del país pero viene cada año a cumplir esa función. Es una fiesta a todo dar. Muchos ceremoniales, comida, prille, brindis, de mentas, bolones, maní, maíz, refrescos para los niños y a los adultos bebidas y comidas. Creyentes de todas partes asisten a esta celebración, muchos desde el día anterior para disfrutar del prille que se lanza a San Miguel el día anterior en un rio seleccionado previamente.
Como se puede notar San Miguel está presente en el mundo de los creyentes de San Juan y de otras partes del país, quienes aprovechan cada celebración para rendirle tributo y pedirle les ayude a bloquear las amenazas que se ciernan contra ellos, conforme a su nivel de creencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario