R. Ignacio M.Sanchez
En serenata, de un atardecer, oye la historia que me contó un día , el viejo enterrador del cementerio, Tellelle, así se llamaba, me dijo el viejo soldado de la Independencia, quizás, tal vez, uno de lo que vino con el Prócer Sánchez , por el Cercado y sobrevivió, sentado bajo la Mata de Guasima, Aquella,.
¡Era un amante que la suerte impía,
su dulce bien le arrebató la parca, en una horrible noche
hizo pedazo el mármol de la tumba abandonada,
cabó la fosa y se llevó en sus brazos el rígido esqueleto de la muerta,
allá en aquel tálamo mullido, tendió a su lado la osamenta fría,
su horrible cráneo coronó de flores
su horrible boca la cubrió de besos,
y celebró su boda con la muerta,
y para siempre se quedó dormido junto al rígido esqueleto abrazado ¡
yo me recuerdo de aquel enterrador de la comarca, y yo estaba sentado junto a mi hermano, y otro yo, ese dia, aquel verso de Teyeye,
ResponderEliminar!Oye dijo, la historia que me conto' un dia el Viejo enterrador de la comarca,toda la noche se iba al sementerio a vicitar la tumba de la amada,
Era un amante a quien la suerte impia,su dulce bien le arrebato' la parca,en una horrible noche hizo pedazo el marmol de la tumba habandonada,tendio a su lado la ozamenta fria y celebro bodas con la muerta
ato' con cinta su desnudo huesos, su horrible craneo corono' de flores y su boca la cubrio' de besos,y acotose junto a Ella Enamorado alla en talamo mullido consiguio funebre la llama incierta,y contoles sonrientes sus amores,y para siempre se quedo'dormido.junto al rijido esqueleto habrazado....