Identidad sanjuanera: Anteproyecto de la celebración de la muerte de nuestro caudillo Enriquillo, el primer libertador de América

Caonabo Peña
Poeta y Narrador
Gestor Cultural

Que genera a su vez, un conjunto de actividades culturales, étnicas, sincréticas, creativas, talleres manuales, charlas y conferencias, versadas en dicho contexto histórico y nuestro desvenir identatario de la capital, de la cultura hispánica.

La cultura puede considerarse actualmente como el conocimiento de los rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan una sociedad o grupo social.

Ella engloba, además de las artes y las letras, los modos de vida, los derechos fundamentales del ser humano los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias (…), la cultura da al hombre la capacidad de reflexionar sobre sí mismo. Es ella la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. A través de ella discernimos los valores y efectuamos opciones, a través de ella el hombre se expresa, toma conciencia de sí mismo, se reconoce como un proyecto inacabado, pone en cuestión sus propias realizaciones, busca incansablemente nuevas significaciones, y “crea obras que lo transcienden”.

La cultura es el fundamento necesario para un desarrollo auténtico. La sociedad debe realizar un esfuerzo importante dirigido a planificar, administrar financiar las actividades culturales. A tal efecto se han de tomar en consideración las necesidades y problemas de cada sociedad en sub-conjunto, sin menos cabo de asegurar la libertad necesaria para la creación cultural, tanto en su contenido como su orientación. “(…) vivimos en un momento de la historia en que hemos llegado a desmantelar o a destruir culturas con gran eficiencia, con el objeto de establecer economías (…). Destruir culturas para establecer economías, ese es el juego en el que estamos y que nuestros países están siguiendo alegremente”, lo crítico es el empobrecimiento del espíritu humano, debido a que ponemos la economía no al servicio de las personas, si no las personas al servicio de la economía.
La cultura no solamente tiene el valor social, espiritual, ético, histórico y simbólico de representar y producir los sentidos e imaginario en los pueblos, sino también la condición de generar adicionalmente un impacto económico que da lugar al comercio de las industrias culturales y comunicacionales.

La cultura es, además un elemento indispensable en la cohesión social y la reconstrucción de una identidad, un sector económico tan o más importante que cualquier otro sector productivo. Transacciones económicas en el seno de la cultura genera efectos económicos positivos como el aprendizaje y el conocimiento. Es decir que el sector cultural contribuye al desarrollo tanto desde los ámbitos sociales e identatarios que le son propios, como desde su participación en lo económico.

Se considera la cultura como base de los procesos económicos. Además se establece que el potencial económico de la cultura es un valor agregado en las sociedades avanzadas, las cuales consideran que la cultura y las artes a través de sus productos introducen una mayor eficiencia en la sociedad. Esto provoca una economía que se desarrolla en términos óptimos. La cual podría decirse, pues, que la cultura es un elemento endógeno del crecimiento económico.

Asi, la cultura, como cualquiera de los bienes y servicios que se transan en una sociedad monetarizada, tiene costos, productores, consumidores, puede medirse y cuantificarse a través de metodologías estadísticas y econometricas aplicadas a los procesos culturales. Pero aún así, las relaciones entre economía, cultura y artes son recientes. Es evidente que nos encontramos en presencia de un nuevo marco teórico, que exige otras visiones desde las ciencias sociales y económicas.
No podemos olvidar que la cultura es, además de un concepto impreciso con múltiples connotaciones, un bien económico singular, producto de un proceso en el que participan creadores y distribuidores, organizados más o menos formalmente para hacer llegar los productos culturales a un heterogéneo mercado de consumidores.

La ignorancia acerca del potencial económico y de la importancia en el empleo de la actividad cultural - incluida las industrias culturales y las artesanías- afectan de una manera fundamental la elaboración de las políticas culturales.

¿Que entendemos por Economía y Cultura?
Frente a un nuevo paradigma de desarrollo.

Los distintos modelos de desarrollo diseñado desde los años sesenta por numerosos organismos internacionales para mejorar la calidad de vida, pese a su constantes revisiones, no han logrado responder a las expectativas que habían suscitado. En buena medida, debido a que el propio concepto de desarrollo se ha definido en términos exclusivamente materiales, (número de embalse, fábricas, viviendas, cantidad de alimentos y agua entre otros), midiendo indicadores meramente económicos. Auque se trate de bienes y servicios a todas luces vitales, dichos modelos no han tenido en cuenta el verdadero concepto del desarrollo, el desarrollo humano.

No cabe concebir hoy en día el desarrollo humano sin su vertiente cultural, es más, como su eje fundamental, pero para ello, es necesario recuperar el valor intrínseco de la cultura y situarlo en el contexto de desarrollo. La acepción antropológica del término cultura ha terminado por triunfar, al establecer la cultura de una comunidad como la columna vertebral de su desarrollo. De ahí la indivisibilidad de cultura y desarrollo.

En el caso nuestro: La plaza Ceremonial Taina, La Aguita de Liborio, La Cueva de Seboruco, La Higuera, Sosa o el nombre original Lemba.

Así, el verdadero desarrollo de una sociedad no se limita a su crecimiento económico, sino a las posibilidades de concretar la dimensión cultural del desarrollo. En él contexto de una sociedad globalizada de alto contenido tecnológico y que orienta sus esfuerzos hacia una sociedad del conocimiento, se induce la necesidad de nuevos paradigmas de desarrollo, donde “el capital cultural” está influyendo notablemente en las tendencias de los procesos que marcan su rumbo.

Si ciertamente se conoce de la importancia de uno de esos componentes, como lo es el “capital humano”, lo cual ha implicado justificar la inversión en educación, hoy en día el “capital cultural” es la fuerza síntesis de todo el proceso de producción de bienes y servicios, en donde la creatividad se convierte en el eje, capaz de establecer una combinación entre modernidad, tecnología, talento y productividad. En el escenario de la sociedad contemporánea los productos derivados de estas combinaciones, son columna vertebral del progreso, el desarrollo social y los mercados.

De suerte y manera, que orientar los esfuerzos hacia el desarrollo en base al capital cultural, sea tangible o intangible, resulten ser un valor activo tanto económico como cultural, convirtiéndose, por tanto en la tarea más apremiante de las economías actuales. El capital cultural ha estado demostrando su capacidad de vincularse directamente en el consumo final, o a través de combinaciones con otros productos para dar lugar a más bienes y servicios, fenómenos en que genera mayor dinamismo económico y cultural.

En tal sentido, esta concepción indivisible entre cultura y desarrollo, inlluye de manera notable en la correlación del crecimiento económico desde las llamadas industrias culturales y comunicacionales, de la creación, de base cultural o más recientemente denominadas “industrias de nueva economía”.

Así, la cultura aparece como apreciable terreno de innovación y competitividad. Las industrias de la nueva economía son obligadas referencia a la hora de medir el grado de avance de cualquier país. De este modo, para construir o mantener una producción plural, de calidad, es necesario diseñar políticas públicas de fomento dirigidas también a estas industrias por su aporte a la economía y, especialmente, por su indiscutible contribución a la promoción y divulgación de la más diversas expresiones culturales entendidas desde una perspectiva amplia.

Es así, que estas industrias vienen a jugar un papel de primer orden, representando a escala mundial uno de los sectores económicos más estratégicos en materia de inversiones de capital y de mayor crecimiento relativo del empleo, contribuyendo de forma segura a su desarrollo, aliada a los adelantos de la ciencia, la tecnología, la concentración y transnacionalizacion de capitales, y con ello, a las políticas de globalización económica.

Estas industrias, las cuales a la vez que son actividades de producción y comercialización tienen como materia prima una creación protegida por el derecho de autor, que contribuyen además a fortalecer los factores vinculados a la identidad, equidad, sustentabilidad y gobernabilidad, reforzando a la vez factores éticos y estéticos de una nueva ciudadanía.

Objetivo General:

Levantar decidida y definitivamente nuestros valores y riquezas autóctonas, étnicas y culturales y poner frenos a las culturas foraneas que nos alienan

Objetivos Específicos:

Enriquecer y fortalecer el espíritu humano.

Poner en práctica y uso nuestro capital cultural.

Dar un salto dialéctico al comercio de las industrias culturales y comunicacionales.

Lograr una verdadera y definitiva cohesión social, soliviantando nuestros valores de identidad.

Poner en manos de las comunidades un nuevo método creativo de una economía moderna sostenible y sustentable.

Poner la economía al servicio de las personas

Ofrecer a la juventud de nuestras comunidades un método de producción moderna y eficaz, que le permitirá exhibir mañana valores éticos y estéticos.

Objetivos y Estrategias del Proyecto

Lograr la unificación de todos los gestores culturales de la provincia.
Desarrollar acciones tendentes a la búsqueda de financiamiento para la actividad propuesta.
Focalizar las instituciones nacionales e internacionales que financien económicamente el proyecto.
Establecer vínculos y enlaces culturales con gestores culturales nacionales e internacionales y hacer sostenible un intercambio cultural que fortalezca el proyecto.

Dar promoción y difusión oral y escrita por todos los medios de comunicación nacionales e internacional.

Establecer charlas y conferencias en diferentes lugares para afianzar y solibiantar el proyecto.

Preparar una exposición mural en todos los municipio de la provincia con las pinturas históricas de nuestra riqueza cultural, a fin de que por si sola venda nuestro proyecto de corte turístico cultural.

Institucionalizar anualmente estos eventos en la capital Taina de la Cultura Hispánica.

Lograr que estos eventos se conviertan en una industria cultural.

Lograr un mercado internacional para la venta de todas las obras Artesanales y Artísticas.

Misión

Mejorar el desarrollo humano.
Mejorar la calidad de vida de las comunidades.
Unificar cultura y desarrollo.
Abrirnos un espacio en el proceso histórico de globalización.

Visión
Actividades.

Colectivizar la atracción turística cultural nacional e internacional con mira de que la economía de nuestra provincia se dinamice en el ámbito cultural.
Retrotraer del ocio a los artistas y artesanos a fin de lograr que lleven una vida digna.
Atraer a las escuelas de aprendizajes a los jóvenes que tengan vocación en las áreas artísticas.
Con la implementación de estos eventos lograremos la unificación de todos los gestores culturales de la provincia y de la propia región.

Visión final

Poner en ejercicio hoy, lo que nos servirá mañana, para un seguro y promisorio futuro.

Ruta Antropológica, Étnica, Histórica, Cultural y Ecoturistica

Ruta del Cacique Enriquillo, desde la Higuera hasta la Sierra de Bahoruco.

Nota: Aprovechando la Carretera Nueva

Ruta del Apresamiento del Patricio Francisco del Rosario Sánchez, desde Juan Santiago, pasando por la Rancha, Babor, Las Charcas, hasta el parque Sánchez donde se produce su Juicio sumario y luego al cementerio, donde lo ejecutaron al junto de sus compañeros de martirologio.

Ruta de la Batalla de Santome: Desde Punta Caña, las Charcas, Hato del Padre, Juan de Herrera, Chalona, Arroyo Loro, Sabana de Santome, y el recorrido de la retirada.

Ruta de la muerte en combate de Liborio Mateo, desde la aguita hacia el hoyo del Infierno.

Ruta de expedicionarios, desde Sabaneta hasta el Pico Duarte.

Todas estas rutas con el apoyo de Antropólogos, Historiadores y personas versadas en estos asuntos socio-antropológicos e históricos de nuestro pueblo.

Con el interés de que estos proyectos contribuyan a un desarrollo sostenible y el sustentables.