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viernes, 4 de marzo de 2011

Ecce Homo


L. Rosalina Canó S.
Mayo 1949

En la alta cumbre del dolor se empina
con los brazos abiertos sobre la dura cruz
la sacra cabeza coronada de espinas
el sublime Maestro, el divino Jesús

Fue su palabra dulce preñada de sapiencia
la que asombró a los sabios doctores de Israel
pues cada frase suya es divina sentencia
que le quita a la vida cuanto tiene de hiel

Su rostro está surcado por dolor muy profundo
y a ofrecerse propicio por las culpas del mundo
a eso, no más que a eso es que ha venido El

En su pecho que es pira do arde amor infinito
hay una gran herida que sangra sin cesar
pues es con esa sangre dulce rocío bendito
que El promete amoroso nuestras culpas lavar

Oh hermano, si supieras cuanto vale esa sangre
y siguieras las sabias doctrinas de Jesús
todas tus amarguras en miel convertirías
y a El le librarías del peso de la cruz



Nota: Rosalina Canó, es una Maestra histórica de San Juan de la Maguana que forjó generaciones de hombres y mujeres sanjuaneros, entre ellos al distinguido municipe y talentoso abogado Don Arturo Ramírez, esposo a su vez, de la también Maestra de generaciones Doña Violeta de Ramírez, una de las maestras más culta, más refinada y de más fino trato que ha conocido nuestro pueblo. Así pues, los buenos alumnos hemos vivido siempre en el gólgota de los grandes amores que nos legaron esas mujeres llamadas Maestras y que fueron y son no martirologio sino constantes resurrecciones. (SL)

¿Quien Fue Rosalina Canó?


Lesbia Rosalina Canó Salvador, nació en la ciudad de San Juan de la Maguana, el día 25 de Mayo del 1908. Fueron sus padres el Sr. Pedro T. Canó S. y Teolinda Salvador Mateo.


Su Labor Educativa

Desde muy temprana edad se inició en la labor de la enseñanza, ya a los 14 años impartía docencia conjuntamente con sus estudios, con mucho esfuerzo llegó alcanzar los tres bachilleratos, el titulo de maestra normal y el de contador público. Llegó a tomar clases en la Universidad de Santo Domingo en la carrera de Derecho, no pudo continuarlos, ya que tenía a su madre y su abuela bajo su cuidado.

Fue una mujer de carácter y sabias decisiones, buena consejera, maestra de maestros, enseñar fue su norte. Su fe cristiana fue inquebrantable, tomó participación activa en todas las actividades redentoristas y sus queridos monseñores Tomás F. O. Reilly y Reinaldo O. Conors.

Fundó en la ciudad de San Juan de la Maguana la Asociación Patriótica Femenina” junto a un grupo de sus amigas entre las que podemos mencionar Dra. Gladis de los Santos, Doña Altagracia Matos viuda Batista, Doña Elena Calderón, Doña Alfonsina M. de Suero, Doña Rosa Maria de los santos. Esta Asociación se dedicó a enseñar mujeres del servicio domestico, corte y costura, para que aprendieran un oficio y tuvieran de que vivir en el mañana.


Reconocimientos

Recibió innumerables reconocimientos dentro y fuera de su comunidad por su vocación de servicio, entre estos vales mencionar el titulo de “Oblata” otorgada por la Santa Iglesia junto a un grupo de prestantes sanjuaneros, condecoración “Orden de Duarte y Mella” por su labor educadora y la condecoración al servicio social, por su trayectoria y su amplia e inmaculada hoja de servicios.


Fue maestra hasta el final de sus días, al ser pensionada en el Servicio Publico, laboró en el Colegio “Padre Guido Guildea”, “Liceo Pedro Henríquez Ureña” y más tarde creó el “Jardín de Infantes Nuestra Señora del Perpetuo Socorro”, donde recibieron el pan de la enseñanza los hijos y nietos de sus alumnos.

Calle lleva su nombre

La honorable sala capitular del ayuntamiento de San Juan de la Maguana, como reconocimiento a su labor y como buena hija de este pueblo, le concedió en vida su nombre a una de sus calles.

Laboró arduamente en la formación de los estudiantes que luego serían continuadores de sus enseñanzas para así desarrollarse lo que es la educación en San Juan de la Maguana hoy en día. Algunos de los que realizaron esta hazaña junto a ella fueron: Atala Cabral Ramírez, Ana Josefa Paulino, Cristiana Rodríguez (Picanita) y muchos más.

La Profesora Rosalina, como solían llamarles muchos fue siempre buena consejera de todos aquellos que la solicitara, era un placer inmenso escucharla por sus sabios consejos y gran sabiduría.


Su muerte

La muerte la alcanzó en la gracia de Dios el 28 de Junio del 2004 a las 7:45 p.m.,después de recibir los Santos Sacramentos. Sus restos mortales descansan en el cementerio Cristo Redentor de santo Domingo, después del tiempo reglamentario sus restos pasarán a morar junto a su adorada madre y abuela en la ciudad de San Juan de la Maguana.

Sin duda, ella está junto al Señor por todo el bien para con sus prójimos. Por sus aportes a la educación, sus acciones como ciudadana, sus modales personales y valores, será recordada donde quiera que ella estuvo.

En nombre mío, de mis hijas y sus sobrinas, Gracias a Dios por regalárnosla todo este tiempo.

Descansa en paz Mamá querida

Marcia

8 de Julio del 2004

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