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sábado, 12 de febrero de 2011

La tribu más antigua que se conoce en el mundo es la bosquímana o sans



AGENCIAS

MÉXICO, D. F.- Luego de estudiar el Ácido Desoxirribonucleico (ADN) en la sangre de miles de personas alrededor del mundo, el genetista Spencer Wells concluyó que el hombre tiene un ancestro común que vivió en África hace aproximadamente 60 mil años.

Al dictar la conferencia “La Travesía del Hombre”, el especialista de National Geographic destacó que estos resultados representan nuevos hallazgos, pues colocan el origen del hombre miles de años más cerca de lo que se creía y con un grupo ancestral común.

En el acto realizado el pasado jueves en el Museo Nacional de Antropología, precisó de los resultados de estudiar el cromosoma y el ADN humano durante el año pasado, se desprende que el origen del hombre se localiza en la tribu bosquímana o sans de África, cuya información genética puede rastrearse a 60 mil años en el pasado.

Subrayó que esa información genética es la más antigua que se conoce en el mundo, lo que demuestra que es la tribu más primigenia y descendiente directa de los antepasados del hombre como tal y no el homo sapiens.



“Nuestra investigación muestra que los parientes lejanos (de los bosquimanos o sans) se fueron de África y comenzaron a trazar el árbol genealógico de la humanidad. De ellos partieron todos los colores, los credos y las nacionalidades que existen hoy”, dijo.

Wells indicó que se sabe que los primeros hombres emigraron de África hace unos 50 mil años debido a la hambruna ocasionada por la última era glacial que sufrió la Tierra, y en la cual los desiertos, como el del Sahara, se extendieron y las especies de animales disminuyeron.

“Zonas de praderas se convirtieron en desiertos y las presas escasearon. Los cazadores que antes atrapaban fácilmente el alimento, ahora lo buscaban con desesperación. La humanidad estaba a punto de extinguirse”, detalló. La mayoría de los ancestros del hombre emigraron a Asia Central, para luego dividirse, continuó al referir que algunos prosiguieron su camino hacia el este asiático y otros emigraron al norte, para luego continuar la trayectoria hasta Europa. Detalló que de los humanos que se fueron al este de Asia, algunos bajaron por la India y llegaron hasta Australia, en tanto que otro grupo continúo por China y Siberia, para luego cruzar por el estrecho de Bering, hasta llegar a América.

“La sangre de los aborígenes australianos me dice que han heredado un marcador muy antiguo africano, de unos 50 mil años, mientras que los africanos no tienen ningún rastro en la sangre de los aborígenes australianos en la suya. Entonces, el tráfico humano se produjo en un solo sentido: de Africa a Australia”, puntualizó.

El genetista reiteró que los chinos, rusos, indígenas americanos, europeos, hindúes y demás grupos étnicos del planeta tienen un marcador genético en común, que han heredado a través de su historia. La separación por razas, acotó, ocurrió hace apenas unos 20 mil años, condicionada por el lugar y el clima, pues a menor calor era necesario reducir la cantidad de melanina (sustancia que da el color de la piel) y, por ende, poseer una tez más clara para absorber los rayos solares y producir vitamina D.

La exposición de Wells se realizó en el marco de la exposición “África”, que se muestra en el Museo Nacional de Antropología, y los pormenores de los hallazgos serán presentados el próximo 15 de diciembre por el National Geographic Channel.

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