Por: Ing. Jose Augusto Moreta Perez
Es inconcebible que a pesar de las reiteradas
reseñas de advertencias realizadas desde
el portal Identidad sanjuanera, sobre el inminente peligro en que se encuentra lo que queda de
las ruinas del Ingenio que funcionó en San Juan en el siglo XVI, cuyos cimientos todavía
permanecen, ninguna autoridad competente se haya interesado y dado una
respuesta cierta. Los testimonios dados
por los que allí han estado, revelan que
ya es intolerable la desidia e inacción de los que están llamados a responder
por la restauración de dicho patrimonio
histórico que debemos legarle a las generaciones del presente y del futuro.
Bien lo dice una nota de reflexión, publicada por José
Enrique Méndez (IKE) en Identidad sanjuanera, que hiciera el historiador miembro de la Academia
Dominicana de la Historia, de la
diáspora dominicana en EE.UU, Anthony Stevens-Acevedo……. “Los restos de uno de los primeros ingenios
azucareros de las Américas ubicados al sur-este de la ciudad dominicana de San
Juan de La Maguana, escenario de los comienzos del encuentro entre europeos,
indígenas y africanos que marcó para siempre lo que sería el “Nuevo Mundo”,
están hoy inundados por canales agrícolas que podrían deshacer para siempre sus
estructuras en muy poco tiempo.
…….“Ojalá
entre todos podamos hacer algo al respecto, y rápido, porque las ruinas de los
antiguos ingenios de San Juan de La Maguana, como las de tantos otros de República
Dominicana, no durarán indefinidamente y es nuestra memoria colectiva como
pueblo lo que nos jugamos. Todo indica que se necesita un plan de acción, de
protección y promoción del patrimonio histórico-colonial dominicano bien
concebido, que identifique recursos para ponerlo en marcha, y encabezado por
gestores capaces de movilizar todos los recursos posibles, financieros y
humanos, públicos y privados, para hacerlo una realidad que la misma sociedad
dominicana abrace y defienda”.
Parece necesario que vayamos dando pasos más firmes y concretos
que los que se han dado en preocupados reportajes, que aunque han puesto la voz de
alarme y sensibilizado en cierta medida
a los munícipes, no han sido suficientes para que los funcionarios competentes
(llámese gobernación, alcaldía, cultura)
hagan su trabajo con diligencia. El paso concreto a que me refiero es dirijamos
directamente al Presidente de la República para que, como autoridad máxima y
sanjuanero autentico, instruya a quien corresponda, realizar una pronta
evolución y estudio que permita dar los pasos pertinentes para poner en valor
el histórico ingenio que funcionó hace 500
años en la sección de La Culata del Municipio de San Juan. Aquí si cabe que utilicemos la frase de batalla del
Señor Presidente……”MANOS A LA OBRA!!!
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