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viernes, 10 de mayo de 2013

LA MUERTE DE ACHECAR / Relato




Por: José Enrique Méndez


Los agentes de los Servicios de Inteligencia Militar, SIM,  serviles al dictador dominicano Rafael Leónidas  Trujillo,  decían conocer el miedo y coraje de cada uno de los jóvenes rebeldes que se hacían llamar “catorcistas”, y que con orgullo hacían oposición al régimen. Para ellos, eran muchachos buenos, que al final de cada reunión  política, celebrada en la “Sastrería de Hungría”, continuaban tomando tragos en el Tupinamba Bar para luego concluir su jornada revolucionaria en el “Cabaret  Nuevo Amanecer”, disfrutando de los placeres y  licencias sexuales que les brindaban
por interés económico o social las meretrices.

Entre todos los Catorcistas de la época le molestaba mucho Rufino Paniagua, a quien consideraban “malcriado”, un joven muy rebelde pero sobre todo incontrolable. Rufino hizo gala de temeridad.
Cuentan que esta razón llevó a los agentes a darle esa Horrible Golpiza en el cabaret “El Nuevo Amanecer”.

Para los Trujillistas había un verdadero peligro a la paz ciudadana, eran las actividades que realizaba un fino intelectual, que sabía hacer uso de la oratoria y sí que era capaz de conquistar con sus mensajes nuevos adeptos al entusiasmo por las ansias de libertad, se trataba del Dr. José Oscar Viña Bonelly, un aguerrido abogado, hijo de San Francisco de Macorís, a quien los servicios de inteligencia habían señalado como cabecilla de un grupo de conspiradores, que dirigían un programa radial del Movimiento Revolucionario Catorce de Junio, a través de la emisora de radio local “Radio San Juan”,
El Dr.. Alfredo Achecar, un ciudadano empresario Trajo su Emisora desde su natal Pimentel y Fundó Radio San Juan por 1953 estableciéndose en San Juan de la Maguana.

Cada noche a través de Radio San Juan, Oscar Viña Bonelly, llamaba a la juventud a la construcción de un nuevo ambiente moral, hablaba de las ansias de libertad y la necesidad de alcanzar una sociedad con altos valores morales y políticos.

El fenecido Ing. Sinecio Ramírez nos narra que “el programa era de Unión Cívica que todavía estaba en "buenas" con los 1J4 o sea los Catorcitas. José Oscar Viñas Bonelly era un buen orador para la radio, y era también redactor de nuestro Periódico Anti Trujillista " Tribuna Libre" que se publicó en la Imprenta ‘El Cable’ más o menos 14 meses. Entre los redactores también estaban Víctor Rodríguez Marcano, y el Dr.R. Cucurullo, Médico. Y tuvo una destacada presencia el DR. Arcadio Rodríguez Susaña Medico, presidente de Unión Cívica”.

Una de esas noches, tropas policiales apresaron en la acera frontal de la emisora, ubicada entonces en la calle Capotillo, frente al Convento de las Monjas, a Daniel Decena, Hungría Sánchez, Sinecio Ramírez y Gabriel García. Desde entonces como medida de seguridad, optaron por enviar una cinta magnetofónica con la grabación de cada programa.

Sinecio Ramírez, militante catorcista de la época nos dió su versión de los hechos:

“Los Trujillistas y sus "calieses" ( Soplones o Chivatos) hostilizaban el programa lanzando piedras al techo de Zinc y nosotros nos escondimos entre unos setos del Colegio Católico Hoy llamado "Padre Guido. El plan era sorprender a los tiradores de piedras. Como el hecho era manejado por las autoridades, probablemente las piedras las tiraban guardias o policías, así que cuando nos descubrieron ellos mismos nos arrestaron”.
Pipiro, Alemán, Rafael Labourt, Hungría Sánchez, Daniel Decena, y cientos de jóvenes sanjuaneros sumaban sus energías, realizando reuniones en la piscina del Hotel Maguana, en la Sastrería de Hungría y finalmente en el local del 1j4. en la calle 16 de agosto esquina Colón.

En San Juan, una noche, el
Lic. José Alfredo Achecar Achecar subió la mirada para verse morir.
El guardia huyó con su fusil recién descargado, convencido de que había cumplido la tarea de matar al Dr. Viña Bonelly, se dirigió hasta la Bomba de Gasolina de Hernán, y en presencia de “Temo”, encañonó a uno de los chóferes de la Línea Estrella Blanca, llamado “Chón”, obligándole a sacarlo de la ciudad.

Tratando de reconstruir los acontecimientos que hoy se pierden y que quizás otros puedan enriquecer a fin de que no se desaparezcan en la memoria histórica de nuestro pueblo recogemos el parecer de los protagonistas de la época y su juicio histórico de hoy.

El Lic. José Alfredo Achecar  "fue asesinado por error causando como reacción, mas afectos a la oposición que rechazaban estos "estertores finales de la tiranía".
Sinecio concluye diciendo “Después de treinta años de Tiranía, los más viejos y los jóvenes estábamos hastiados del régimen y perdimos el miedo a la represión (. ...)
El miedo mayor era que Ramfis y Radhames se quedaran como los Hijos de Anastasio Somosa en Nicaragua e iniciaran otra etapa de la "era de Trujillo". Había que desalentarlos, por suerte salieron más flojos que su "viejo " caudillo.
Todos estábamos acostumbrados a hablar mal del Gobierno Trujillista a pesar del riesgo a ser delatados por algún infiltrado. ¿ por qué no nos metían presos y nos fastidiaban ? porque éramos tantos en todo el país que no había cárceles suficientes ni motivos sólidos de acusación”.

Años más tarde en 1965, en Santo Domingo una patrulla militar constitucionalista, del Comando de San Juan de la Maguana, en la Revuelta Armada de Abril, apresó el la zona constitucionalista entre las calles Hernando Gorjón con Altagracia al asesino del 
Lic. José Alfredo Achecar.

Cuentan que agonizando, confesó que aun quería completar la orden trujillista de asesinar al comandante constitucionalista
Dr. José Oscar Viña Bonelly.


 Nota, Tras  la publicación de este relato se nos acercó el Dr. Rafael Achecar Chupani , médico residente en Estados Unido, quien nos ofreció una entrevista sobre la muerte de su padre .November 30 2004

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