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jueves, 16 de abril de 2009

El Apocalipsis taíno en la obra “Revelaciones” de Carl Valenzuela y Gina Farias



José Enrique Méndez


El Apocalipsis bíblico, es el escrito más rico en símbolos, donde eventos y procesos complican la tarea de interpretar la totalidad de la revelación y como tal, ha sido objeto de numerosas investigaciones.

En “Revelaciones” obra apocalíptica taína, escrita a dos plumas por los reconocidos escritores sanjuaneros Carl Valenzuela y Gina Farias, hay pasajes ricos en símbolos y eventos que parecen dar respuesta a los actuales efectos devastadores del calentamiento global de la tierra.

Sin lugar a dudas fueron inspirados en el carácter profético de los antiguos testamentos de la Biblia, cuando nos hablan de que: “El primer ángel tocó su trompeta y fueron lanzados sobre la tierra granizo y fuego mezclados con sangre. Se quemó la tercera parte de los árboles y toda la hierva verde. El segundo ángel tocó su trompeta y fue lanzado al mar algo que pareció un gran monte ardiendo en llamas y la tercera parte del mar se volvió sangre. La tercera parte de todo lo que vivía en el mar, murió, y la tercera parte de los barcos fueron destruidos”.

En su Apocalipsis Taíno, Carl y Gina, como si nos quisieran advertir e invitar a tomar mayor conciencia de la necesidad de preservar el medio ambiente y las especies de la fauna y la flora en todo el mundo, nos prevén en sus revelaciones:

“E aquí que vi un ángel sobrevolar la isla, a su paso despertaron los volcanes dormidos, surgieron chorros de lava incandescente e incontrolables y bajaron desde las altas montañas arrasando toda clase de vida a su paso. Finalmente fueron a detener su furia en las agitadas aguas del mar”.

Es como si intentaran descifrar o completar el enigma del Apocalipsis 8.6 bíblico, cuando narra las espantosas catástrofes y luchas que han de conmover al mundo antes del triunfo de Cristo en estas palabras:

“El tercer ángel tocó su trompeta y una gran estrella ardiendo como una antorcha, cayó del cielo sobre la tercera parte de los ríos y sobre los manantiales. El cuarto ángel tocó su trompeta y fue dañada la tercera parte del sol”

Al parecer inspirados en acontecimientos contemporáneos que han de venir, Gina y Carl revelan: “Las ardientes lavas originaron incendios que consumieron la poca vegetación que aun quedaban en las faldas de la montañas.
Entonces del cielo empezó a caer una fina y fría llovizna, pero al pasar las horas la misma se convirtió en lluvia cerrada y esta lluvia se convirtió en huracán. Cayeron granizos y rayos, los ríos se desbordaron y la oscuridad total cubrió la isla”

La realidad no es distinta:
Se extiende cada vez más la convicción de que sólo a partir de una nueva actitud ante la naturaleza que nos rodea podremos preservar a largo plazo incluso nuestra propia existencia en la tierra
Y es que la situación real hoy es alarmante : La contaminación del medio ambiente a permitido la expansión del producto fitosanitario DDT, la formación del agujero de ozono a causa de los fluorocarburos clorados con las consecuencias eventuales de las emisiones atmosféricas para el clima mundial, el número creciente de casos de cáncer de piel.
Las estadísticas oficiales indican que el contenido de metales en las Ostras hoy en día es más de 5 veces mayor de lo que era hace 10 años.


Cada día el hombre tiene mayor conciencia de la necesidad de preservar el medio ambiente y las especies de la fauna y la flora en todo el mundo:erra.
En el futuro el agua cada día se convertirá en un recurso de suministro restringido, y ya la situación se ha tornado crítica en algunos países.
Si consideramos que toda la cantidad de agua disponible sobre la tierra, en 1400 Millones de Km3, el 97% es agua salada y apenas un 3% es dulce, o sea si toda el agua fuera un litro, la cantidad disponible para los seres humanos serían solamente 3 gotas. La explicación de esto es que el agua de la Tierra o es salada (océanos) o está en forma de hielo (iceberg); del agua dulce disponible en la tierra, un 77% es agua congelada, un 22% es agua subterránea y apenas un 1% , ( 420, 000 kilómetros 3) es superficial.
Es importante destacar que 1/3 de las aguas superficiales totales son las aguas de los 15 mayores ríos, de los cuales como ejemplo el Amazona tiene el 15%.

Hoy se sospecha de sustancias químicas que desarrollan mutagenicidad hacia los animales y el hombre, es decir modifican el patrimonio genético.

Las estadísticas oficiales indican que el contenido de metales en las Ostras hoy en día es más de 5 veces mayor de lo que era hace 10 años.

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